Recoger las larvas de manera manual, buscando alrededor del cuello de las plantas.
El recojo manual debe iniciarse a partir de las 9 de la mañana, con la incidencia del sol directo. Las plantas dañadas empiezan a presentar síntomas de marchitamiento que permiten detectar con facilidad el lugar de presencia de las larvas.
- Catalán, W. (2012). Guía técnica: Manejo integrado en el cultivo de maíz amiláceo blanco.Editado por Agrobanco - Universidad Nacional Agraria la Molina. Acomayo, Cusco.
- Diragri Cusco, Manual: Manejo Integrado de Plagas MIP. Proyecto Maíz Amiláceo